Azul Mar Eterno

Asómate a mi mar.
Confunde su azul con el cielo.
Mar traquilo y sosegado.
Mar Eterno.

SE BAÑAN EN MI MAR

martes, 24 de mayo de 2011

NUESTROS HIJOS SON HERMOSOS

Nuestros hijos son hermosos.
Crecieron entre queso y azúcar.
Estudian y juegan
a básquet y al ajedrez.
Son trigo dorado
entre campos de amapolas.
Brillan
en la apatía de las noches
y, luego,
nos los matan en una curva.


Vuestros hijos son hermosos.

No pesan ni veinte kilos
y las moscas
divagan por su piel.
Juegan al fútbol descalzos
y a la guerra
con munición real.
A esos hijos,
los matamos entre todos.

6 comentarios:

  1. Triste pero cierto,
    Que los niños jueguen
    a las guerras con
    munición de verdad
    y ya durante tanto tiempo
    es para caernos la
    cara de vergüenza.

    Gracias por remover
    conciencias.

    Besos
    .

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  2. Tu poema nos pone de frente a dos mundos reales, dos vidas distintas, dos muertes absurdas.
    La pregunta es, qué hacemos apra evitarlo?

    Un abrazo fuerte, querida Amelia.
    Leo

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  3. Tremendo, Amelia: una hermosura y un golpe en los nuestros; una hermosura y otro golpe en los suyos. Gracias por recordármelo.

    Un abrazo

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  4. He leído varias veces este poema y cada lectura duele mucho más y se queda latiendo en la sien. Me cuesta digerirlo porque, desgraciadamente, continúa siendo una crónica fiel de la realidad.


    Un fuerte abrazo.

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  5. Maravilloso poema de belleza terrible.

    Dos tremendas realidades; de las dos, somos todos responsables.

    Besos.

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  6. Leí tu poema también el el blog solidario.
    Me encantó, hermana.
    Un abrazo enorme.

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