Si
escribiese como antes,
cuando los
girasoles cantaban,
y las
banderas rojas
flameaban en
libertad,
escribiría
que no me
importa la lluvia,
ni las palabras tendidas
ni tu piel
secándose
en la
frontera.
Te diría que
muero
y tú dirías:
“di, mejor,
espero”.
Pero no
espero.
Muero.
Sin ti,
no espero.
Muero.
Mas, es
mentirosa muerte
cuando los
visillos saben
de mariposas
noctámbulas,
de los
hogares en ruinas
y de tiempos
sin espera
donde no nos
encontramos.
Te diría que.............
ResponderEliminarcariños amiga
Querida amiga encontré una página llena de poetas universales, de todo el mundo, incluso traducidos, y los he leído (como habrás de suponer) y no he encontrado en ellos esa sensación de brisa tocándome el alma; quiero decir tu verso entregándome a manos llenas algo más que palabras.
ResponderEliminarUn gran beso querida Amelia
Olvidar la forma de los encuentros es una manera de morir.
ResponderEliminarPor suerte siempre nos quedan las letras, por lo visto vos las seguís encontrando!
Besos-